En Ancud, en el sector de San Juan, la comunidad inició un proceso de participación ante una iniciativa que pretende instalar tres aerogeneradores en la cuenca del Río Huicha, que se sumaría a una serie de proyectos energéticos en la misma zona.
Preocupación existe en el sector en el Sector de San Juan, en la comuna de Ancud, por una serie de proyectos que se pretenden desarrollar en la zona. El último de ellos fue presentado al Sistema de Evaluación Ambiental por la empresa Coloane Spa, y pretende la instalación de 3 turbinas eólicas, a orillas del río Huicha en el sector de San Juan, en la comuna de Ancud.
Pero más allá de la última iniciativa, desde la comunidad organizada apuntan a la necesidad de generar una planificación territorial ante el creciente número de proyectos energéticos que se pretenden instalar en la zona.
ORDENAMIENTO
En este contexto, Mariela Núñez, Directora del Centro de Biodiversidad El Encanto, señaló que las comunidades ante el desconocimiento del último proyecto debieron solicitar al SEA un proceso de consulta para poder informarse. La científica reparó en el hecho de hay una serie de proyectos que se pretenden instalar en la zona.
“La problemática que ocurre en este lugar es que hay una diversidad de proyectos de inversión que se están planificando en la misma zona. Por ejemplo, en el mismo camino San Juan, desde ese cruce a hacia el interior. Luego, desde Pumanzano hasta Chacao, hay una línea de alta tensión, entonces, la comunidad está pasando por una serie de procesos de evaluación de impacto ambiental por estos proyectos, de consulta indígena, y este proyecto que podría verse como pequeño, frente a todos los otros proyectos nos pone la problemática que no hay una visión integral del territorio”, expresó.
En esta línea, señaló que falta un criterio para analizar desde lo general el impacto de estas iniciativas, sin olvidar también el carácter turístico de la zona, por lo que debe tender a generar proyectos más sustentables. Agregó que la idea no es oponerse a esto, sino que se realice bajo un proceso participativo e informado.
“Estas eólicas se van a instalar, creemos todos los ciudadanos que habitamos el lugar, que no es un lugar óptimo. Podría planificarse en otra parte del mismo territorio, pero justamente en ese lugar, a orillas del Río Huicha, con la infraestructura que se va a instalar, claramente habrá un impacto negativo a la flora, la fauna, a la diversidad acuática y lo que no se está considerando en esta Declaración Ambiental es la escasez hídrica del territorio”, expresó.
Un ejemplo de ello es la propuesta que se les ha presentado a los vecinos del APR de Huicha, quienes están hace 10 meses con prohibición de consumo por altos niveles por sobre norma de algunos metales. Una de las alternativas sería extraer agua del río, mismo afluente donde kilómetros arriba se pretende instalar las turbinas, con el impacto que eso generaría en la sedimentación del río, lo que afectaría al APR.
“El mismo estado le quiere dar esa alternativa de solución y hoy se le quiere instalar 3 turbinas, entonces, ves que la DGA hizo un excelente proceso de revisión (…), pero por otra parte la DOH dice que no hay afectación de las turbinas, sin embargo, es la DOH que propone sacar agua del río Huicha como solución alternativa. Entonces ves esas contradicciones y analizas que no hay una visión integral de territorio”.
FALTA VISION INTEGRAL
Aquí, señaló Núñez, en el análisis macro se desprende una falta de planificación y visión integral del territorio al momento de instalar estos proyectos, que ingresan al SEA por separado, evaluándose individualmente, sin considerar los demás proyectos que se buscan desarrollar paralelamente en un mismo sector.
“Esa sumatoria es la que no se está considerando al momento de la evaluación y por eso pedimos una visión más integral de todos esos proyectos. Acá hay una línea de alta tensión, 33 turbinas que ya están aprobadas, este proyecto de 3 turbinas más otras que se están instalando e ingresando el sistema de evaluación ambiental, entonces, obviamente eso es lo que nos preocupa, que se siga expandiendo sin planificación del territorio y afectando los valores ecológicos, culturales y el turismo de los habitantes que quieran desarrollar esas actividades económicas”, expresó.
Según explicó, los instrumentos que debieran regular este tema son los Planes Regionales de Ordenamiento Territorial (PROT), el que en Los Lagos no está actualizado. “En la región no tenemos un PROT actualizado, está pendiente de parte de la Gobernación Regional esta herramienta, obviamente con nuevos estándares de sustentabilidad y nuevas metodologías que existen para poder avanzar hacia un desarrollo sustentable. Frente a la carencia de este instrumento ocurre que no hay una guía de cómo revisar esta inversión”, expresó.
La científica también apuntó al rol del Municipio ante la solicitud de observar algún proyecto de este tipo. Aquí sus instrumentos son el Plano Regulador y el Pladeco, y según señaló Núñez, también están desactualizados.
“Finalmente estamos frente a un proceso participativo de la comunidad que habita un territorio que va en función de la institucionalidad vigente, avanzando y coordinando con los distintos gobiernos locales, regionales y generando instancias de diálogo, para generar conocimiento, educando a la gente y la misma empresa se va dando cuenta de las carencias de sus estudios, y puede que tome la decisión de instalar esas turbinas en otro lado (…) es una forma de trabajar antes de llegar a las manifestaciones”, expresó.
Fuente: El Insular