Por: Claudio Thimeos / Columnista
Desde hace ya algunos años atrás se viene hablando de la construcción de un Parque eólico en el sector de Mar Brava en la comuna de Ancud. Los más optimistas apuestan por el proyecto y ven de manera positiva esta inversión en cuanto al desarrollo para la comuna, polo turístico, entradas de dinero en cuanto a patentes municipales etc., mientras que otros prefieren ver el vaso medio vacío y no apoyar tal proyecto. Estos últimos tienen diferentes motivos, pero como a mi juicio ya se ha hablado mucho de lo negativo de este parque eólico, hoy me gustaría centrarme más en lo positivo.
Para comenzar este tema, y para que ustedes entiendan un poco el contexto, debo empezar contando que soy un fiel amante de Chiloé y de Ancud por sobre todo. Aunque nací en Punta arenas soy Chilote prácticamente, mis padres son nacidos en Chiloé y llegué con ellos desde Punta Arenas a Ancud a la edad de 7 años. Soy prácticamente un Ancuditano de tomo y lomo, y por historia familiar siempre sentí (y me inculcaron) que uno debía ser un aporte a la sociedad en el ámbito que sea, pero dejar una huella o un aporte tangible al entorno donde uno vive. Por lo mismo en Ancud he tratado de hacer mis aportes; sin ir mas allá al detalle, presenté mi proyecto de título en base al turismo de Ancud en la municipalidad en el año 2007, he trabajado en Ongs medio Ambientales, he formado agrupaciones que han hecho aportes a la música local, he hecho programas de televisión con contenido basándome en figuras locales ancuditanas , etc.
Por qué es importante contar parte de mi vida se preguntaran ustedes. Bueno, simple: creo que todos tenemos derecho a tener una opinión (más cuando es un tema tan importante como el tema del Parque Eólico de Mar Brava). Toda opinión es válida y debe ser escuchada con respeto, pero también cada uno debe ser consecuente con lo que dice y con lo que hace, porque claro, si yo sólo me dedicara a criticar y hablar, hablar y hablar sin haber hecho nada TANGIBLE, caería en la categoría de “charlatán”. Por la misma razón, frente a cada tema que me interesa y que creo que puede ser un aporte a mi amada ciudad de Ancud hago lo básico: investigo acerca del tema, saco las conclusiones y las expongo, y en el caso del Parque eólico de Mar Brava no fue la excepción.
Una de las primeras cosas que me puse a investigar fue si es que en Europa realmente la instalación de parques eólicos ha afectado al turismo, y encontré varios casos en donde ambos han sabido convivir de buena manera, es más, casos en donde estos en conjunto se han potenciado. Así ha sido el caso por ejemplo del parque eólico de Whitelee, en Escocia, que queda a más menos 15 minutos de la ciudad de Glasgow y en donde uno puede recorrer sus más de 260 turbinas a pie, caballo ,en bicicleta ,etc., teniendo más de quinientos mil visitantes al año, turistas que llegan gracias a este naciente “turismo eólico”.
Entonces ¿ por qué no pensar que la playa de Mar Brava se podría convertir en un segundo “Whitelee” y así Ancud convertirse en un pionero en Chiloé en cuanto a “turismo eólico”? no es esto mejor acaso que tener la playa sin ningún servicio turístico y sólo con micro basurales?, y de no construir un parque eólico, ¿cuál sería una mejor propuesta para utilizar realmente de forma “TURISTICA” esta playa?
Creo que todos estamos de acuerdo en que Chiloé debe cuidar su cultura, el medioambiente y su entorno, y creo que el camino más efectivo para lograr esto es trabajar en conjunto con las autoridades respectivas, con los diputados y senadores que representan la zona, y así poder desde ya crear leyes para que todo adelanto que llegue a Chiloé conviva en armonía con el entorno, con su gente y lo principal: que beneficie y le dé un plus a toda la comunidad. Creo que ese es el camino más eficiente y no decirle “no” a todo proyecto que se quiera emplazar en la zona, ya que lo único que logramos con eso es retraso, estancamiento e involución como ciudad, porque como la naturaleza y su historia lo han demostrado, una especie que no evoluciona está destinada a desaparecer.