El candidato ha participado en política desde los 18 años y afirmó que ha recorrido más de ocho mil kilómetros haciendo campaña durante estos últimos dos meses. En su recorrido se encontró con vecinos y vecinas que le piden tranquilidad, paz y seguridad.

Durante el aniversario del estallido social estuvo en campaña y comenta que la única preocupación de los vecinos y vecinas era la seguridad. “No les preocupa que no tengan agua, que el abono, que la tierra, que la papa. No están preocupados de eso porque hoy en día la televisión solo muestra el estallido social”, expresó el candidato diciendo que hoy existe una política de trincheras.

“Yo no sé qué estará pensando el municipio de Ancud”, criticó Julio sobre la falta de cámaras de vigilancia en la comuna. Añadiendo que esto puede ser uno de los proyectos financiados por el Consejo Regional. El candidato prometió abrir una oficina para ayudar a los vecinos y vecinas en la asesoría de sus proyectos. Por ejemplo, incluyendo alarmas comunitarias o solucionando el problema de conectividad digital que existe en la isla, principalmente, por la brecha digital de personas mayores.

Por último, el candidato se refirió a la escasez hídrica que hay en el archipiélago indicando que no existe un control de la deforestación del bosque nativo. “Ya tenemos y vamos a seguir teniendo el problema del agua”, expresó Julio y criticó las plantaciones de eucaliptos y la extracción irregular del pompón. Además, indicó que se deben buscar estudios y expertos para encontrar agua en Chiloé, por ejemplo, los pozos profundos, para, eventualmente, presentarlos como proyectos.